“El crimen del Campo Grande, de María Sanz Casares: del amor y de las
coincidencias”
He aquí la reseña que hizo Raquel M. Soto en Fábula, Revista Literaria, nº 29, otoño 2010, pp. 75-76
La ciudad de la furia, como cantaba Gustavo Cerati a finales de los ochenta, es el destino de un avión en el que viaja una pareja de completos desconocidos con rumbo a cerrar una serie de negocios a la capital Argentina. R. y R. son las iniciales de Rocío y Ricardo, dos jóvenes con vidas muy diferentes pero destinadas (y nunca mejor dicho) a unirse por una serie de incidentes en su historia. Ricardo, a pesar de sentirse mal por no haberse despedido de su novia Susana de la mejor manera, no puede evitar sentir curiosidad por Rocío Carranza, su bella e inteligente compañera de viaje. La química surge entre ambos y deciden indirectamente tener una cita: Ricardo tiene que adivinar el día, lugar y hora de la presentación del libro sobre escultura floral que ha escrito Rocío.Llegado el gran día, ésta se impacienta: el misterioso y atractivo chico que le hizo compañía en el largo viaje trasatlántico no aparece por la puerta. A punto de arruinar uno de los días más importantes de su vida, la artista decide olvidarlo. No así Ricardo, que llama a Rocío para disculparse y decirle la causa de su ausencia: un asesinato. Alguien muy cercano a él ha muerto en un crimen que está ocupando todas las portadas de los periódicos vallisoletanos.El crimen del Campo Grande es una historia hecha a través de perspectivas, cada capítulo nos narra un hecho visto desde los ojos de cada personaje implicado en la narración, lo que nos hace conformar a través de todas esas miradas un panorama general y completo de lo ocurrido.Gracias a unos diálogos directos que discurren con gran agilidad y a una notable narración nos inmiscuimos en la naturaleza de los sentimientos de sus personajes hasta adentrarnos en lo más profundo de sus impulsos para al fin comprender el porqué de sus acciones, estemos o no de acuerdo con ellas.El amor en varias de sus variantes: el agotado, el naciente de modo inesperado, el idealizado, el obsesivo, el resignado. Las coincidencias, las tretas del destino que para bien o para mal nos unen y nos alejan de aquellos que nos rodean, la importancia de la comunicación fluida entre las personas, la denuncia social de algo tan de actualidad como los malos tratos junto a una trama detectivesca conforman el relato escrito por Sanz Casares, el cual recomiendo por su entretenida lectura a todos aquellos (y a los que no, también) que como yo, creemos en las casualidades y en los giros inesperados de la vida.
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